viernes, 15 de febrero de 2013

Capítulo Once.

Cuando llega a su camarote, Shara abre el armario y coge un precioso vestido azul para ir al teatro, y luego, a cenar.
-¡Qué vestido más bonito, tía! -dice sorprendida Celia.
-¿Enserio? Ay, muchas gracias. -le agradece Shara a la chica.
-Sí, es precioso. ¿Vas a ir al teatro? -pregunta Celia.
-Sí, vente, así pasamos el rato. -propone Shara.
-Bueno, vale... Voy a buscar algo que ponerme, vete duchándote para luego ducharme yo. -dice Celia levantándose y yendo a buscar en el armario algo de ropa para ponerse.
Shara deja su vestido sobre su cama y se mete en el baño a ducharse. Después de ducharse, Shara se viste y deja la ducha libre para Celia. Al entrar en la ducha, Celia coge el bote de jabón y dice sorprendida:
-Dios mío... Este jabón en Londres cuesta muchísimo dinero... Y aquí, es gratis. Jajaja. Lo aprovecharé al máximo.
Al terminar de ducharse y vestirse, Celia avisa a Shara de que está lista. Es entonces cuando van las dos muy felices hacia el teatro. Por el camino, se encuentran con África y Miguel.
-¡Chicos! ¿Venís con nosotros al teatro? -pregunta Celia.
-Chicas, que vestidos más elegantes. -halaga África.
-No, no vamos, tenemos otros planes. Quizás tampoco estemos en la cena. -contesta Miguel.
-Por cierto, yo pasaré la noche en el camarote de Miguel así que no me esperéis despiertas... -aclara África con una sonrisa pícara.
-Madre mía, no quiero imaginar lo que vais a hacer. Jajajajaja. -dice sonriendo Celia.
-Pero Miguel, ¿tú no tiene una hermana? ¿Hay camas suficientes? -pregunta Shara.
-Sí, claro que tengo una hermana. Estamos en una suite, tenemos una cama de matrimonio donde duermen nuestros padres y, en una habitación independiente, una cama, donde duerme Emily y un sofá cama, donde dormiremos África y yo. -responde Miguel.
-Gracias por la aclaración. Jajaja. Aunque creo que lo menos que haréis esta noche será dormir... -insinúa Shara.
-¡Shara! -exclama con cara de sorpresa África.
-¡Qué era broma! Jajajaja. Bueno, nosotras ya nos vamos. ¡Adiós! -se despide Shara mientras se va yendo hacia el teatro con Celia.
Ya en el teatro, Shara y Celia se buscan un asiento. Dan con dos asientos que están libres en una fila desde la que se ve el escenario perfectamente. Al rato, llega una preciosa chica de ojos claros y de unos catorce o quince años aproximadamente. La chica se sienta al lado de ellas y les saluda:
-¡Hola! ¿Habláis inglés?
-Sí, somos inglesas. ¿Tú? -responde Celia.
-Soy croata, pero hablo inglés casi a la perfección. ¿De qué parte de Inglaterra sois? -dice la chica.
-De Londres. ¿Tú de qué parte de Croacia eres? -pregunta Celia.
-De Zagreb, la capital. -responde sonriente la chica.
-Bueno, ¿cómo te llamas? -pregunta Shara.
-Macarena. ¿Vosotras? -dice la chica.
-Yo soy Shara. -contesta Shara.
-Y yo, Celia. -responde Celia.
-Preciosos nombres y preciosos vestidos, al igual que las personas que lo portan. -halaga Macarena.
-Muchísimas gracias, preciosa. Igualmente. -devuelve amablemente el halago Shara.
De repente, se apagan las luces y Macarena dice:
-Bueno, creo que ya va a empezar. He oído por ahí que el espectáculo de hoy es algo sobre la magia.
-Genial, me gustan mucho esas cosas. -dice Shara.
-A mi también. -añade Celia.
El espectáculo dura unos cincuenta minutos. Cuando éste termina, las tres chicas se dirigen juntas al restaurante donde van a cenar. Por el camino, conversan sobre sus gustos y aficiones. Al llegar al restaurante, se tienen que despedir, ya que, cada pasajero tiene asignado un número de mesa distinto. Celia y Shara tienen la mesa asignada con África y Harry, pero, como África no está, tendrán que comer sólo con Harry. Cuando las dos chicas llegan, Harry ya está en la mesa. Celia saluda al chico con un beso en la boca y le pregunta:
-¿Dónde has estado hoy, cielo?
-En la piscina y en el jacuzzi, sólo ahí. Jajajaja. Bueno, y en el buffet. -contesta su novio.
-¿Y te lo has pasado bien? -dice sonriente Celia.
-Sí, perfectamente. -responde con una sonrisa Harry.
Mientras los tres conversan en el restaurante, piden la comida y cenan, África está con Miguel en el camarote de éste. Cuando Celia y Shara estaban en el teatro, África y Miguel veían una película romántica que compraron en el barco. Los dos tortolitos estaban acurrucados en el sofá cama del camarote de Miguel.
-La película ya ha terminado, África. -dice Miguel.
-Bueno... Todavía son las nueve y media.... -dice África queriendo insinuar algo.
-Ya lo sé. -dice con una sonrisa pícara Miguel.
África le mira a los ojos y le besa apasionadamente. Miguel la besa en el cuello y, así, los dos terminan en algo más que besos y empiezan a tener toqueteos el uno con el otro.
-¿Sabes una cosa que nunca te he dicho? -dice África con un tono sensual.
-¿El qué? -le pregunta impaciente Miguel.
-Me pones. -responde África mordiéndose el labio.
-Eso ya lo sabía yo. -dice Miguel poniendo su sonrisa pícara de nuevo.
-Pues demuéstramelo. -dice desafiante África.
Pronto, los toqueteos van cada vez más y más y desembocan en lo que ya es más que evidente. Después de un buen rato, terminan.
-Miguel -dice África llamando al chico.
-Dime. -responde su novio.
-¿Era tu primera vez? -pregunta África.
-Sí, ¿y la tuya? -dice Miguel.
-Hombre, pues claro. -responde África.
-Bueno... ¿Sabes? -dice Miguel.
-¿Qué? -pregunta África.
-Te quiero. -dice sonriente Miguel mirando a los ojos a la chica.
-Más que yo, imposible. -dice África dándole un beso a Miguel en los labios.
Acto seguido, Miguel le da un beso en la frente a África y los dos se acurrucan en el sofá cama para dormir. Hoy ha sido un día con muchas, pero que, muchas emociones.

viernes, 8 de febrero de 2013

Capítulo Diez.

En el camarote 6235, las ganas de viajar no caben en la habitación.
-¿A qué país llegamos mañana? -dice Diego muy entusiasmado.
-Mañana bajamos en Croacia. Llegamos sobre las cinco de la mañana y desembarcamos a las ocho, así que hay que estar despiertos prontos. -dice Omar bien informado.
-Croacia, siempre he querido visitar ese país. -dice sorprendida Sandra.
-Chicos, me voy a dar una vuelta por el barco, ¿alguien viene conmigo? -dice Andrea.
-Ahora voy contigo, déjame colocar mi maleta en el armario. -dice Omar guardando la maleta.
-Ya está, vámonos. -dice Omar cogiendo del brazo a Andrea.
-¡Anda! Si por los pasillos suena música. Jajaja. -dice Andrea sorprendida.
-Sí, además está en un tono muy agradable, ni muy alto, ni muy bajo. -dice Omar.
-La canción me suena montón... ¿A ti no? -dice Andrea intentando pensar que canción debe ser.
-Se llama "Baker Street" y es de Gery Rafferty. Siempre me ha emocionado esa canción, sobretodo la parte del saxofón. Además, me recuerda a mi infancia. -contesta Omar nostálgico.
-A mi siempre me ha gustado y ni siquiera me sabía el nombre. Jajajaja. Muchas gracias, la voy a apuntar para descargarmela cuando lleguemos a Inglaterra. -dice Andrea sacando su móvil.
-Jajajaja. ¿Adónde vamos? -pregunta Omar.
-Vamos al puente tres, ahí es dónde están las tiendas. -dice Andrea entusiasmada.
-Tú siempre pensando en tiendas. Jajaja. -dice Omar.
Los dos cogen el ascensor, donde se encuentran con una chica alta y de pelo castaño. Tiene algo de botox en los labios.
-Hola. -saluda Andrea.
-Hola. -contesta la chica.
-¿Qué tal? ¿De dónde eres? -pregunta Omar.
-Bien. Yo soy de Grecia y vivo en Croacia. Pero tranquilos, hablo inglés. ¿Vosotros sois de Inglaterra? -dice amistosamente la chica.
-Sí, somos de ahí. ¿Cómo te llamas? -dice Andrea.
-Martine-Ágata Vasilopoulos. Pero me podéis llamar Martine. -dice sonriendo la chica.
-Yo soy Andrea. -se presenta Andrea.
-Y yo Omar. -añade Omar.
-Bueno, este es mi puente. Adiós, encantada. Ojalá nos veamos posteriormente. -dice Martine bajándose en el puente cuatro, donde está su camarote.
-Adiós, cuídate. -se despiden Andrea y Omar.
Un puente más abajo, Andrea y Omar, al salir del ascensor, se encuentran con África y Shara.
-¡Chicas! ¿Qué hacéis aquí? -dice Andrea.
-Vinimos a pasear un rato, ahora íbamos al puente nueve. ¿Os venís? -dice África.
-En otro momento, ahora nos vamos de tiendas. Jajaja. -dice Andrea.
-Pues, en otro momento será, adiós. Jajaja. -dice Shara entrando en el ascensor con África.
Omar y Andrea siguen su camino por el puente tres, hasta que llegan a la parte comercial.
-¡OMAR! ¡ESTO ES EL PARAÍSO! -dice Andrea eufórica.
-Eres una exagerada. Jajajaja. -dice Omar.
-Quizás, pero esto que hay aquí lo merece. Dios, que pena que no esté tu madre aquí. -dice Andrea mirando todos los escaparates.
-Jajajaja. Créeme, sería un poco incómodo. -dice Omar.
Mientras tanto, en el puente nueve, África sale como una loca del ascensor para ir al restaurante donde está Miguel y su hermana.
-Claro, y Miguel era el que no te gustaba, ¿verdad? -dice sarcástica Shara.
-No me gusta, sólo... Es que lo aprecio. -dice ruborizada África.
-Sí, sí, aprecio. Jajaja. -dice riéndose Shara.
-¡MIRA TÍA, ES ÉL! -exclama África llena de euforia.
-Calma, calma, calma. -bromea Shara.
-¡Miguel! -lo saluda África.
A lo lejos, Miguel, que está sentado en una mesa, la ve, se sorprende y le devuelve el saludo con la mano, ya que tiene la boca llena. África y Shara se acercan a él.
-¿Qué pasa, bro? -dice bromeando Shara.
-Jajaja. Nada, aquí hinchándome a espaguetis. ¿Vosotras venís a comer? -pregunta Miguel limpiándose la boca con una servilleta.
-No tenemos hambre, al menos yo. -dice África.
-Bueno, tortolitos, me voy a la piscina, que está aquí mismo. Adiós. -se despide Shara.
-Adiós, guapa. -dice Miguel.
África se queda algo trastocada después de esto, pero consigue articular alguna que otra palabra:
-Esto... Miguel... ¿Hoy no había una reunión para los que embarcamos hoy?
-Sí, ¿cuándo es? -pregunta Miguel.
-Uy... Es dentro de diez minutos, será mejor que vayamos bajando... -dice África.
-Vale, pero deja que me coma el yogur. -dice Miguel apurado.
Cuando el chico se termina, el yogur, se va con África al puente tres, dónde está el bar en donde se celebra la reunión.
-Pasad por aquí chicos. -dice amablemente una azafata rubia de ojos azules.
Miguel y África se sientan al lado del grupo de Omar, Sandra, Harry y el resto. Después de esperar como unos cinco minutos, empieza la reunión.
-Bueno... Muy buenas tardes, me llamo Samantha y voy a ser vuestra asistente de habla inglesa durante todo este crucero... -comienza la azafata.
Después de pronunciar esas primeras palabras, Samantha sigue con el resto de instrucciones, reglas, y demás cosas importantes en el crucero. La reunión termina después de cincuenta minutos. Ya estaba atardeciendo.
-África, ¿subimos al puente once a ver la puesta de sol? -propone Miguel frente el ascensor central del puente tres.
-Vale, ¿por qué no? -acepta África.
Ya en el puente once, los dos salen a la cubierta y, mientras África se apoya en la barandilla, Miguel la abraza por detrás.
-¿Qué bonito no? -le dice África a Miguel.
-Muy bonito. Pero no más bonito que lo que yo siento por ti. -le dice Miguel a África casi en el oído.
Al oír esto, África gira su cabeza, se pone cara a cara con Miguel y los dos se funden en un apasionado beso. Esta bonita escena es interrumpida por Shara, la cual viene de cotilla por detrás y dice rebosante de sarcasmo:
-África, ¿ese no era el que no te gustaba?
-¡Hostia! ¡Qué susto tía! Jajajajaja. -dice África sonrojada.
-Casi me sacas el corazón del susto. -dice Miguel bromeando.
-Exagerados... Jajajaja. -dice Shara.
-No, enserio, eres preciosa tía, pero, joder, que puto susto. Jajajaja. -dice África riendo.
-Jajaja. ¿Vamos al camarote, África? Y luego vamos al teatro y eso. -dice Shara.
-Vete yendo tú, que me voy a despedir de Miguel. -dice África mientras se dispone a besar a Miguel.
-Tía, me encantas. Jajaja. -dice Shara yéndose.
¿Durará el amor de Miguel y África o tan sólo será un simple romance vacacional?

domingo, 3 de febrero de 2013

Capítulo Nueve.

Han pasado unos días desde que África recibió la noticia de que se iba de crucero, y hoy, por fin, es el día de coger el avión a Venecia. Eran las cuatro de la mañana y tenían que estar todo el grupo (Omar, África, Sandra, Harry, Diego, Celia, Chris, Sara, Helena, Mariana, Shara y Andrea) en el aeropuerto a las seis de la mañana. Llegarían a Italia sobre las diez de la mañana. 
-¡OMAAAR! -grita Harry desde su habitación.
-¡Harry! No grites que es muy pronto. -le riñe su madre.
-Mamá, no encuentro mi camisa de Avenged Sevenfold. Omar la cogió el otro día y no me la ha devuelto. -dice Harry.
-¡Omar! ¿Tienes la camisa de Avenged Sevenfold de tu hermano? -pregunta su madre.
-Sí, toma. Dásela. -dice Omar dándole la camisa a su madre.
-Toma, Harry. -dice Abigail.
-Gracias, mamá. -agradece Harry.
Pasado un rato, todos cogen sus maletas y se meten en el coche de Eric para que, él y Abigail, los lleve al aeropuerto. Al llegar a éste, los tres hermanos se despiden de sus padres y se disponen a buscar al resto del grupo. 
-¿Dónde estarán? -dice África mirando hacia el horizonte.
-Dijeron que estarían enfrente de la cafetería... -contesta Omar.
-¡Mira! ¡Ahí están! -dice África.
Los tres van corriendo hacia ellos. Harry le da un beso a su novia, África le da un abrazo a Sandra y Omar, le da otro a Diego. Después de pasar todos los controles, llega la hora de entrar en el avión. Todos están nerviosísimos por el crucero, ya que nunca han hecho uno. Pasadas las más de de tres horas de viaje, llegan a Venecia. Al bajarse del avión, cogen un autobús que les lleva hasta la zona donde está atracado el crucero. 
-Dios mío... El barco es impresionante. -dice estupefacta Helena.
-La verdad que sí. He visto fotos en Internet del interior. Es precioso. -añade Mariana.
-Nos lo vamos a pasar de puta madre, chicas. -dice Harry.
Al bajarse del autobús, van hasta la puerta de embarque. Ahí, les dejan las maletas al personal mientras ellos hacen todo los trámites necesarios. Cuando los trámites están hechos, se dirigen a sus camarotes. Omar, Sandra, Diego y Andrea están en el camarote 6235; África, Harry, Celia y Shara, en el 6243; y, Mariana, Helena, Chris y Sara, en el 6212. En la puerta de cada uno de sus respectivos camarotes, encuentran sus maletas. Entran y colocan todo su equipaje en unos espaciosos armarios que hay en los camarotes. 
-Omar, ya he colocado mi ropa y eso. Voy a dar una vuelta por el barco con Shara. -le dice África a su hermano.
-Vale, yo luego quizás voy a la piscina. Adiós, no te vayas a perder. Jajajaja. -contesta Harry.
África y Shara salen del camarote y se van hasta el ascensor para ir hasta el puente número tres, donde se encuentra la zona de descanso. Al entrar al ascensor de encuentran con dos chicas. Una chica es alta, morena y guapísima y la otra es algo baja y con unas gafas extravagantes y enormes. La chica de las gafas les saluda en croata, por lo que África y Shara no la entienden. La chica, se da cuenta de que son inglesas, así que les saluda en inglés.
-Hola. ¿Sois inglesas, verdad? -pregunta la chica de las gafas.
-Sí, somos de Londres. ¿Vosotras de dónde sois? -responde África.
-Somos de Croacia. -responde la chica morena.
-Guau, Croacia. Me encanta ese país. -dice Shara sorprendida.
-Jajaja. Es bonito. A mi me gustaría visitar Inglaterra. -dice la chica morena.
-Por cierto, ¿cómo os llamáis? -pregunta la chica de las gafas.
-Yo soy África y esta es Shara. -responde África.
-Bonitos nombres. Yo soy Jo y esta es Patricia. -dice Jo, la chica de las gafas.
-Encantadas, chicas. -dice Patricia.
-Igualmente. -responde África sonriente.
Al llegar al puente tres, África y Shara se despiden de Jo y Patricia, ya que éstas van al puente dos. África y Shara caminan mirando sorprendidas a todo el lujo que les rodea, cuando, de pronto, Shara ve a un chico que le suena y le dice a África:
-África, ¿ese no está en tu clase? -dice Shara señalando al chico.

-Hostia. Ese es... Miguel. ¿QUÉ COJONES HARÁ AQUÍ? -dice África alterada.
-¿Te pasa algo con él? -pregunta Shara.
-Ese se me declaró el otro día. William cortó conmigo por eso. -contesta África.
-¡Hala! Jajaja. La chica que está a su lado es guapísima. -dice Shara.
-Sí, sí, guapísima... -dice África celosa.
-Vamos a saludarlo. -propone Shara.
África se niega rotundamente, pero Shara pasa de ella y pega un grito:
-¡MIGUEL! 

El chico se gira y ve a África. Entonces, él y la chica que está a su lado se dirigen hacia Shara y África para saludarlas. 
-Hola. -dice la chica que está con Miguel.
-¿Qué tal chicas? ¿Qué coincidencia, no? -dice Miguel sonriente.
-Sí, la verdad que sí. -dice África tímidamente.
-Ésta es mi hermana, Emily. -dice Miguel.
-Encantada. -dice Shara mientras le da dos besos a Emily.
-Igualmente. -dice África mientras hace lo mismo que Shara.
-Bueno, nos vamos a comer. -dice Miguel despidiéndose de las dos chicas al mismo tiempo que se va con su hermana.
-Adiós. ¡Qué os aproveche! -se despiden Shara y África.
¿Qué África y Miguel se encontraran en el crucero es coincidencia o es el destino? Sin duda alguna, este crucero va a estar muy movidito teniendo a África y a Miguel juntos en un mismo lugar.